SOPLAR LAS VELAS DE UNA VIVIENDA RESIDENCIAL
Cuando nuestro aliento apaga la llama, en nuestro interior renace un deseo. Solo dura un instante es una sensación infantil, un momento “casi” mágico que nos permite rozar nuestros sueños.
Hay algo muy poderoso en un deseo, porque encierra una resolución. Muchas veces se trata de una promesa que nos hemos hecho a nosotros mismos en el silencio de una noche de estrellas fugaces y que no deseamos que se desvanezca en la arena del tiempo. El doctor en psicología y ensayista Carl Gustav Jung aseguraba:
“Tu visión se hará clara sólo cuando mires dentro de tu corazón. Quién mira afuera, sueña. Quién mira dentro, despierta.”
Ahora que ha comenzado un nuevo año, todos nosotros hemos, como decía Jung, mirado en nuestro interior y despertado para reescribir la lista de nuestros mejores deseos. Una lista de buenos propósitos. Deseamos y necesitamos dejar atrás el fatídico año de la pandemia, de la fractura social, la inquietud económica y la paralización de casi toda la actividad: académica, profesional y creativa. Tuvimos que aprender a compartir abrazos virtuales, visitarnos a través de las pantallas y a esperar la llegada de las vacunas contra el Covid. Lo hicimos para que todo mejorase, para que pasara la tormenta y que desaparecieran todos nuestros temores y la amenaza de la enfermedad.
Mientras tanto, nuestros deseos han permanecido intactos, aguardando el mejor momento para que se cumplan. En La CLAU group Andorra, deseamos retomar uno de esos buenos propósitos de la lista de este año: “Vivir como siempre has soñado”. Y hoy, esto es posible gracias a una de las viviendas de nueva construcción: Residencial Marió. Nuestra promoción de pisos que se está construyendo para ti en la zona Els Vilars d’Engordany, en Andorra.
Els Vilars d’Engordany es un pequeño núcleo de la parroquia de Escaldes-Engordany. Al norte de Engordany, en la falda del pico de Padern. En este lugar se puede encontrar la iglesia prerrománica de Sant Romà dels Vilars del siglo X, y que a su vez se trata de uno de los templos más antiguos de Andorra.
¿Cómo son las nuevas viviendas?
En la descripción de una de ellas encontramos los siguientes detalles: Apartamento con mucha luz y vistas al colegio Sant Armengol, ubicado en una de las mejores zonas residenciales de Escaldes, zona muy tranquila y cerca del centro del país.
Este fantástico piso de una superficie de 147m2, se encuentra muy bien distribuido y consta de un recibidor con armario empotrado, cocina espaciosa independiente, amplio salón comedor con grandes ventanales que a su vez nos aportan luminosidad y vistas agradables a la montaña.
Con un total de 4 dormitorios, 1 de ellos tipo suite con su baño completo y con la posibilidad de hacer un vestidor, 2 dormitorios dobles, 1 individual, 2 baños completos. Todo el piso es exterior. Dispone también de dos plazas de parking en el mismo edificio y un trastero de fácil acceso.
Todo esto, como decíamos a muy poca distancia del centro neurálgico de Andorra la Vella, bien comunicado y con algunas de las mejores vistas del país de los Pirineos.
Esto es exactamente lo que siempre habías estado buscando. Tu secreto deseo al soplar las velas puede hacerse hoy realidad, solo tienes que venir a vernos en nuestras oficinas de calle Maria Pla, 22 de Andorra y te mostraremos todo el detalle de la distribución antes de visitarlo en la obra.
ALGO DE HISTORIA SOBRE LA UBICACIÓN
Muchas personas han gastado verdaderas fortunas en una búsqueda que parecía la del Santo Grial para encontrar la vivienda más idónea. Han invertido además mucho tiempo, recursos personales y energías en un desgaste físico y emocional que ha rozado el agotamiento. En nuestra diana, el centro del objetivo brilla con luz propia para conducirnos sin errores ni confusiones al blanco de nuestras mejores expectativas. Y nosotros estaremos encantados de poder ayudarte, de mostrarte todos los detalles y ventajas de la obra nueva en uno de las zonas de Andorra con más historia y legado cultural.
Todos conocemos la expresión culinaria “escaldar”, que procede de la práctica de calentar el agua hasta alcanzar la temperatura de ebullición y sumergir en ella algún alimento. A través de la historia, el agua caliente ha tenido también otros usos.
A finales del siglo XIV, cuando Andorra era todavía una comunidad agrícola y ganadera ya existían las conocidas aguas termales que se aprovechaban, entre otras cosas, para lavar y teñir la lana. Esta antigua práctica supuso la aparición y concentración de una rudimentaria industria de trapos de lana en el núcleo de Caldes. El desarrollo de esta manufactura textil culminó en 1604, a principios del siglo XVII con la constitución de la Cofradía de Paraires, los artesanos que preparaban la lana para la confección del tejido en las hilaturas de la época. A estos primeros productores se unieron también los tejedores de Sant Pere Màrtir y Sant Ivó.
Aunque la superficie de terreno cultivable en Andorra es muy baja, la agricultura, conjuntamente con la ganadería, fueron los principales soportes de la economía andorrana hasta que surgió el turismo. La ganadería ovina era tradicionalmente la principal actividad económica, pero las plantaciones de tabaco resultaron más lucrativas y es a lo que se ha destinado la mayor parte de la superficie de labranza. En la actualidad la comida de Andorra continúa siendo de excelente calidad, pero casi toda ella es importada.
A 1.053 metros de altitud sobre el nivel del mar, se desarrolla la vida de Escaldes-Engordany, la séptima parroquia de Andorra. Recientes estudios arqueológicos y de paleontología sitúan a sus primeros habitantes durante el siglo I a.C. Este es un dato importante porque nos habla de sus primeros pobladores y nos da una idea de lo muy apreciada que ha sido siempre la vida en nuestro país.
DURANTE LOS ÚLTIMOS MESES SE HABLÓ DE RESILIENCIA
Si algo nos vincula al pasado, no son solamente nuestros recuerdos sino también nuestra capacidad de afrontar y superar los problemas. Poco podían imaginar nuestros abuelos que vivirían una guerra, una posguerra y ahora una pandemia sin precedentes que ya ha afectado a más de 1,7 millones de personas en todo el mundo.
A finales de diciembre de 2020 llegó el V-day, el día del virus o el momento en que se comenzaría a hacer frente a la enfermedad con la nueva vacuna. Un remedio urgente, experimental y a su vez necesario y que comenzó por la población de más edad.
Todos hemos visto aquellas imágenes en las que un tsunami o una tormenta tropical doblegaba las palmeras hasta casi lamer el suelo. Cuando el viento y la lluvia dejan de azotar, la palmera regresa a su estado natural, erguida y sobreviviente. La resiliencia es una cualidad que no surge espontáneamente, es algo que se aprende, una determinación o decisión personal que adoptamos antes de que se presenten las dificultades.
La Covid-19 ha puesto a prueba nuestra capacidad de recuperación no solo en cuanto a la salud o la economía sino también con relación a nuestras emociones. Dentro de esa recuperación o resiliencia deseamos marcarnos un objetivo, encontrarlo como decía Jung, dentro de nosotros y proyectarlo hacia el futuro. Cuando hablamos del futuro nos referimos a dos conceptos diferenciados: el futuro incierto o el inmediato. El incierto es como mirar la Luna y esperar el momento en que podamos visitarla; en cambio el inmediato podría vivirse esa misma tarde o mañana y en cierto modo, nuestros pies continuarían pisando tierra.
En cierto modo, el futuro, para que sea creíble debe tener alguna certeza. En La CLAU group Andorra, deseamos que tu futuro inmediato tenga todas las garantías. Que puedas informarte sobre las ventajas de adquirir una vivienda de nueva construcción, aquí en Andorra, un paraíso de invierno que miles de personas disfrutan también en verano. Recupera tu lista de buenos propósitos para este año, busca en tu interior y toma en cuenta el bienestar de tu familia visitando Residencial Marió, en pleno centro de Andorra.
Únete a la discusión